Ya he comentado en otros post la importancia de la elaboración y diseño de menú de restaurantes como herramienta de marketing de nuestros negocios. Es fundamental diseñar bien el menú, adaptándose a nuestro cliente. El diseño de menú de restaurantes es fundamental a la hora de abrir un restaurante o negocio de hostelería.
Quiero mencionar hoy cómo podemos mejorar y aumentar las ventas de nuestro restaurante con un pequeño truco de marketing aplicado al menú del restaurantes.
En todo menú de restaurantes debemos de tener siempre un artículo / plato a un precio sensiblemente más alto y desorbitado con relación a los demás. Un producto más caro.
Este tipo de plato del menú de restaurantes estará destinado al cliente que está dispuesto a pagar más y que se lo puede permitir. Vender más caro al que puede comprar más caro. “ La disposición a pagar ha de ser explotada al máximo” como diría el price consultant gurú Hermann Simon.
Se han visto en el pasado y actualmente, ejemplos de casos como la hamburguesa de más de 100 usd de varios restaurantes de Manhattan o el hot dog de 69 USD. Casos ambos en los que se logra captar la atención de la clientela, despertando un interés mediático y generando un boca oreja muy interesante para el marketing del restaurante. Se habla de nuestro negocio y eso es importante como estrategia de Relaciones Públicas (radio, prensa, Internet, televisión, social media).
Pero no es únicamente el factor precio lo que hace interesante a este tipo de platos en el diseño del menú de restaurantes. Tenemos que lograr que el plato despierte la atención del cliente, es fundamental.
Queremos dirigir la atención hacia este artículo / plato con una posición adecuada en la estructura del menú de restaurantes, es muy importante.La posición ha de ser en un área de concentración visual atractiva y para ello nos ayudaremos también de un tipo de letra, una foto, signo o símbolo que ponga los ojos del cliente en este plato.
"Cuando el cliente abra el menú de restaurantes lo primero que verá será esa hamburguesa de 100 dólares".Pongo el ejemplo de la hamburguesa por repetir el ejemplo anterior.
¿Que plato pediremos del menú de restaurantes después de haber visto un plato de 100 dólares?.Los desorbitados 100 dólares de la hamburguesas serán psicológicamente adoptados como precio base,precio ancla,a partir del cual el cliente tomará una decisión de compra.
Partiendo de la hamburguesa, un plato de 35 dólares ya no nos parecerá tan caro ¿verdad?
Es más que probable también que no nos decantemos por el plato más económico de la carta.Inconscientemente aumentaremos nuestro gasto previsto de una forma predeciblemente irracional como diría Dan Ariely autor del libro "Las Trampas del deseo".
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